Policías formalizaron este viernes una denuncia penal contra el excomandante Yuri Calderón y su Alto Mando, por delitos como incumplimiento de deberes y otros, que presuntamente hubiesen cometido durante el periodo de convulsión social entre octubre y noviembre de 2019.
El coronel Johnny Tapia Vargas, director de Relaciones Internacionales de la Policía, señaló que las actuaciones de los denunciados durante la convulsión no se enmarcaba en su norma interna.
Aseveró que en reuniones del Comando se hizo conocer al entonces Comandante el diagnóstico de la situación, pero no se lo tomó en cuenta.
Denunció que, por el contrario, el Comandante saliente entonces les ofreció el retiro, por lo cual hubo directores, como él, que se sumaron al motín policial, “en apoyo a la sociedad” -según sus palabras- y por el latente riesgo a la democracia.
Otro denunciante, el coronel Jorge Campos, director nacional de la Interpol, indicó que durante la convulsión hubo instrucciones y órdenes ilegales impartidas a otros jefes, lo cual desencadenó los acontecimientos que ya toda la ciudadanía conoce.
Entre las irregularidades, señaló la protección a organizaciones sociales afines al MAS, pero “hay muchos otros temas que, en la medida en que avanza la investigación, van a dar luces y también se va a hacer público”.
Campos manifestó que el objetivo con la querella es que no vuelvan a suceder esas actitudes con servidores públicos policiales.
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