El presidente Evo Morales afirmó en su mensaje por los 194 años de la Independencia de Bolivia que los protagonistas del cambio que experimentó el país en los últimos 13 años, pasando de una nación pobre, mendiga, a un país fuerte y ejemplo de desarrollo, son todos los bolivianos y urgió a proteger lo logrado en base a la unidad, para construir un mejor futuro para las familias bolivianas.
“Los protagonistas de esta historia somos todos nosotros, y en tanto mantengamos la unidad, vamos a poder proteger lo logrado y construir un mejor futuro para las familias bolivianas”, remarcó en su mensaje a la nación en la Sesión de Honor de la Asamblea Legislativa que se realizó en la ciudad amazónica de Trinidad.
El primer presidente indígena en la historia de Bolivia rememoró con datos la situación del país después de más de 180 años de gobiernos neoliberales, que empobrecieron a los bolivianos y acentuaron mucho más las diferencias y las asimetrías.
“El 6 de agosto de 1825, nos liberamos de la corona española, pero las oligarquías reprodujeron el sistema de exclusión y segregación racial”, remarcó al afirmar que esa lucha por la libertad, gracias al sacrificio, voluntad y esfuerzo de todos los bolivianos y bolivianas, fue olvidada.
Dijo que la República de Bolivia logró su independencia y libertad gracias al sacrificio de los pueblos indígenas, pero se fundó sin tomar en cuenta a los propios indígenas, precisó como un ejemplo de esa actitud de grupos que defendieron solo sus intereses.
“Todo esto que acabo de contar ha sido posible gracias al sacrificio, voluntad y esfuerzo de todas las bolivianas y bolivianos. Todos crecimos escuchando que los bolivianos “no podíamos”. Ese era el lamento boliviano. No podrán gobernar los indios, los bolivianos no sirven para gestionar la economía, los sectores sociales son incapaces de dirigir un país, los cambas y los collas siempre se van a llevar mal, los países vecinos nunca nos mirarán con respeto”, fundamentó.
Por esa razón, afirmó que, como nunca, es urgente consolidar y proteger lo avanzado.
“Tenemos las condiciones para proyectar un futuro ambicioso y con mucha esperanza”, complementó.
A su juicio, el proceso de cambio ha dejado atrás la injusticia y la discriminación neoliberal, para vivir el tiempo del amanecer, de la industrialización, con crecimiento económico, integración y reconciliación.
“Caminamos y trabajamos junto a nuestro pueblo para construir, como hijos de la misma Madre Tierra, un Estado libre, digno y generoso”, refrendó.
El Primer Mandatario afirmó que, con esas políticas, Bolivia ya no es más un país pequeño, debilitado y mendigo. “Ahora somos un Estado digno, libre y admirado”, subrayó.